lunes, 12 de julio de 2010

La leyline blanca de M11


Ha habido un pequeño receso en escribir artículos. Ahora que estoy en jornada completa de estudios (bueno, casi xD) no he tenido tiempo para escribir ni ganas. Magic 2011 al final ha sido mucho más interesante de lo que parecía. La tendencia que parecía instalarle con Rise of the eldrazi worldwike donde las cartas buenas son las míticas y en raras no hay casi nada potable se ha difuminado, tanto por las reediciones como por la calidad de las cartas nuevas.

En las ampliaciones siempre hay mini ciclos de cartas. 5 dragones legendarios, 5 planeswalkers, 5 conjuros... Cada color coge algo representativo de él y se plasma en una carta, con mejores o peores resultados. En esta ampliación volvemos a ver a los planeswalkers de lorwyn, teniendo que comernos el jace antiguo y al ajani blanco puro, que tampoco están mal pero con los nuevos se quedan un poco cortos. Pero lo más chocante sin duda ha sido una especie de reedición-diseño nuevo de las leyline, cartas de Guildpact en forma de encantamiento que si estaban en tu mano inicial empezabas con ellas en mesa.

En Guildpact pasaron con bastante más pena que desgracia. La blanca se ''juega'' en mazos casuales y la verde tuvo un mini atisbo de juego que rápidamente se difuminó. La única que ha visto juego y ampliamente es la negra, leyline of the void, cartaza de side contra dredge y turbodragón en su día que se sigue jugando. La azul y roja hablan por sí solas de lo malas que son.

Pues hay un nuevo ciclo de leylines con m11, mejorando bastante lo visto hasta ahora. En guidlpact salieron rana por el hecho obvio de que un hechizo gratis incontrarrestable desde turno 1 puede ser muy desequilibrante de ser excesivo. En m11 la idea ha seguido ese camino pero siendo mucho más refinada. Todas son jugables (y más la negra, que es la leyline of the void, una reedición xD) pero en particular la que me ha dejado totalmente chocado es la blanca, encabezando este artículo.

¡Una Ivory mask! La ivory vio muchísimo juego durante bastante tiempo, era (y es) cojonuda contra burn al anularle casi todo su mazo, y deja tocado a muchos combos al impedir lanzarte su win condition. Desgraciadamente la ivory se fue viendo relegada por la velocidad que cogían las burn, quedándose en el olvido por otras cartas de side. Pero ahora vuelve, mismo coste pero pudiendo entrar gratis desde turno 1. Centrémonos en legacy pues.

¿Dónde metemos esto? Enchantress tiene todas las papeletas, uno de sus pairrings más complicados justamente es burn y combo y esta carta es excelente contra ambas. Incluso sin salir de mano puede seguir jugándola. Pero donde yo voy a jugarla es en ¡Dredge!

Analicemos lo que mata a Dredge y es jugado habitualmente:
-Tormos crypt
-Relic of progenitus
-Ravenous trap
-Leyline of the void

Con la leyline en mesa anulamos automáticamente la tormos y la ravenous, junto a la primera habilidad de la relic (aunque esto es mucho menos relevante). Ambas son las cartas habituales en mazos como boros o zoo, donde no se pueden permitir hacer mulligan agresivo a leyline of the void. Control también tira de ellas (cunning wish a ravenous y sensei con ravenous en top, uff...), y ambos son pairrings complicadetes.

La relic es otra historia ya que la habilidad que mata es la segunda. Con todo no hay que menospreciar el chaparle la primera para nada. No tendremos que sufrir con estar esperando la respuesta a su relic mientras nos lima el cementerio poco a poco, obligándole seguro a tener siempre 1 maná libre. Se puede decir que esto pasaba antes pero mazos como goblins llevándolas de base alternaban turnos en que, viéndote sin cementerio y descartándote por tener más de 7 al final del turno, se permitían pagar todo el maná porque sabían que no se la liarías. Y ojito a esto, puedes descartar un dragador e ir poco a poco porque ya no te la va a quitar dejando la relic en mesa. Yo sigo jugando con la versión de bloodghast, la cual va muy bien con esta estrategia. Los mazos últimamente llevan x tormos y x relic juntas (1-2, 2-1, 2-2...) por lo que habrá que barajar las opciones de sideo.

Contra la leyline negra no hacemos absolutamente nada. Con esta carta mantenemos la filosofía dredge pura: con suerte nadie gastará 4 huecos para un mazo que ya no está de moda y si los gasta con suerte veremos cómo sidea rápidamente 4 cartazas o estaremos preparados para la tercera partida.

Incluso con esto es dudoso llevarla pero, ¿es así? Contra combo mejoramos muchísimo, y combo habitualmente nos mata. Es cierto que no todos los combos te matan haciéndote objetivo pero tps en sus variantes sigue muy viva. Y aunque contra burn ya íbamos bien con 2 ionas ¿por qué no de paso anulamos su hate y su mazo entero?

Y algo fundamental: hasta que no llevas unas cuantas partidas detrás no descubres la cantidad de cartas que te cargas con la leyline. Por decir una: gifts ungiven. Otra: oath of druids.

¡Fuck yeah!

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